Cantantes solistas: Julia Zenko, Guillermo Fernández
Narrador: Horacio Ferrer
Bailarines / actores: Laura Aguerreberry, Soledad Argañaraz, Paola Bordón, Laura Capria, Rosaura García, Jimena García Blaya, Aymará Parola, Jorgelina Platania, Elena Ponce, Teresa Sevilla, Javier Bazán, Gustavo Bravo Alaminos, Marcos Chávez, Mario Filgueira, Ignacio González Cano, Emanuel Ludueña, Ollanatay Rojas, Sebastián Scandroglio, Omar Sosa
Orquesta: Néstor Marconi (bandoneón), Pablo Agri (primer violín), Raúl Di Renzo (segundo violín), Benjamín Bru Pesce (viola), Carlos Alberto Nozzi (violoncello), Carlos René Bolo (contrabajo), Arturo Erx Schneider (flauta), Cristian Zárate (piano), Enrique Luis Roizner (percusión) y Ángel Frette (vibrafón y placas).
Producción T.N.C: Justo Rueda
Fotografía T.N.C: Gustavo Gorrini
Dirección musical: José Carli
Director musical adjunto: Néstor Marconi
Coreografía: Oscar Araiz
Ingeniería de sonido: Eduardo “Ekuar” Guedes
Pianista de ensayo: Néstor Osvaldo Ballesteros
Manager de escenario: Carlos Sampedro
Solistas suplentes: Laura González y Marcelo Tommasi
Asistente de dirección : Violeta Zamudio
Asistente de dirección meritorio: Gabriel Motta
Asistente de coreografía: Yamil Ostrovsky
Asistente de vestuario: Joanna Nogueiras Yankelevich
Asistentes de sonido: Pablo Pantín, Sebastián Keller, Carolina Guedes
Diseño de iluminación: José Luis Fiorrucio
Diseño de vestuario: Luciana Gutman
Diseño de escenografía y multimedia: Tito Egurza
Diseño de imagen de programa en mano: Lulú Micheli
Dirección: Marcelo Lombardero
María de Buenos Aires es la historia de una muchacha, cuya sombra deambula por la calle Corrientes, una historia que cuenta acerca de aquella Buenos Aires de finales de los años sesenta. En aquel momento, Piazzolla y Ferrer crearon un lenguaje con estilo propio. La propuesta de Marcelo Lombardero, hoy en el Teatro Cervantes, “consiste en crear una estética propia para la obra, que contenga los datos históricos pero que además rescate la contemporaneidad que la misma tuvo en su momento”.
Acerca de la obra
En el año 1968 (hace ya 40 años), Astor Piazzolla y Horacio Ferrer, estrenaban en la sala Planeta, la “operita” María de Buenos Aires.
En años en los que las obras conceptuales y las óperas rock hacían su irrupción, ellos quisieron hacer una contribución al género teatral/musical, tomando elementos de la música ciudadana, la ópera, la música contemporánea y el oratorio, creando un lenguaje y un estilo propios para la obra que debía ser fundacional en su género.
Hoy, el desafío de poner en escena “María”, es hablar justamente de esa génesis.
María de Buenos Aires nos habla de la ciudad que era aquella de las postrimerías de los años sesenta, en donde conviven el cantor de barrio y un beatle.
Nos habla además, de un momento histórico de la música popular de Buenos Aires, de la crisis de la misma y de Piazzolla y Ferrer como los creadores de una nueva forma de pensar la música ciudadana.
La propuesta que llevamos adelante, consiste en crear una estética propia para la obra, que contenga estos datos históricos, pero que, además, rescate la contemporaneidad que la misma tuvo en su momento.
El teatro musical cantado, la danza, la impronta visual, deben conjugarse para contar esta historia, con nuestra ciudad como marco de fondo…
Marcelo Lombardero
Notas:
Página/12 (cítrica)
